El Día Mundial de la Bicicleta se celebra cada 19 de abril para promover el uso de este medio de transporte, llamar la atención sobre los derechos de los ciclistas y destacar sus beneficios para la salud y para la movilidad sostenible. Así que nada mejor que este día para hablar de sus efectos saludables, sobre todo para el corazón.

Beneficios para el corazón de montar en bicicleta

En una sociedad con altos niveles de sedentarismo y con una movilidad urbana muy saturada por el tráfico, cada vez hay más personas que aúnan el cuidado de la salud y del medio ambiente y optan por utilizar la bicicleta en sus desplazamientos. Para el corazón, montar en bicicleta es un ejercicio muy saludable, porque ayuda a prevenir los accidentes cardiovasculares que provocan cada año 150.000 muertes en todo el mundo. La actividad regular de montar en bicicleta mejora el sistema circulatorio y ayuda a controlar algunos factores de riesgo:

• Aumenta el ritmo cardiaco y baja la presión sanguínea, por lo que el corazón optimiza su rendimiento reduciendo el riesgo de infarto en un 50%.
• Reduce el colesterol malo (LDL), responsable de la calcificación de las arterias, y aumenta el colesterol bueno (HDL), protector de los vasos sanguíneos. De este modo, las arterias se muestran más flexibles y se reduce la probabilidad de sedimentación de la placa y de calcificación.   
• Aumenta el gasto calórico y previene la obesidad.
• Al mejorar la tolerancia a la glucosa y desarrollar la sensibilidad a la insulina, previene la aparición de la diabetes.
• Aumenta la capacidad pulmonar y reduce la frecuencia cardiaca y respiratoria en reposo.
• La realización de actividad física regular libera endorfinas que nos hacen sentir mejor y liberan el estrés.  

En general, montar en bicicleta tiene muchos beneficios para la salud a corto plazo: Con sólo diez minutos de pedaleo diario se mejora el rendimiento muscular, la flexibilidad de las articulaciones y el riego sanguíneo. A partir de los 30 minutos diarios se mejora la capacidad cardiaca y se influye sobre los factores de riesgo. Y a partir de los 50 minutos comienza a estimularse el metabolismo graso, aumentando nuestra resistencia y mejorando hasta tres veces nuestro sistema inmunológico.

Consejos para montar en bicicleta

Montar en bicicleta es una actividad apta para todas las personas de cualquier edad y beneficiosa incluso para personas con problemas cardiovasculares o que quieran reducir su riesgo coronario. Sin embargo, siempre hay que tener en cuenta algunas indicaciones básicas:

• Es conveniente consultar con el médico si padecemos alguna dolencia previa para evitar complicaciones derivadas del ejercicio.
• Debemos elegir bien la bicicleta que vamos a utilizar en cuanto a la altura del sillín y del manillar para evitar lesiones: en general, una correcta altura del sillín debe permitirnos, una vez sentados, tener la pierna prácticamente estirada en la posición del pedal más cercana al suelo. El manillar debe permitir tener los brazos ligeramente flexionados.
• Cuidar la postura para evitar lesiones de espalda o forzar las articulaciones: la postura correcta en una actividad que no es de competición es con la espalda recta en ángulo de 90º. Así se evita que el peso recaiga sobre los brazos o los genitales y permite una mejor oxigenación.
• Es conveniente calentar antes y después de iniciar la actividad física, alimentarse correctamente y beber agua.
• Elegir ropa y calzado adecuado a la temperatura y la intensidad y llevar siempre casco.
• Adaptar el ritmo a nuestras capacidades.

Como vemos, montar en bicicleta tiene muchos beneficios para la salud, pero lo mejor de todo es que es una actividad tan divertida y adaptable que hace que casi no nos demos cuenta de que estamos realizando un ejercicio. También es una actividad que puede mejorar nuestras relaciones sociales y familiares: organizar salidas en bici en pareja, en familia o con amigos fortalece las relaciones personales, mejora nuestro humor y aleja el estrés y la ansiedad. Y si además cuida el medio ambiente, ¡todo son ventajas! ¿Te animas?