¿Realmente hay alimentos prohibidos para el colesterol? Cuando una analítica nos indica niveles de colesterol alto, solemos pensar en dietas estrictas y en alimentos censurados. Pero a no ser que suframos alguna enfermedad cardiovascular, la realidad no tiene que ser tan dura. Y es que la causa del colesterol elevado no son tanto los alimentos en sí mismos, sino que depende más de la alimentación y del estilo de vida que llevamos. Optar por un tipo de alimentos en vez de por otros puede ayudarnos a recuperar los niveles adecuados.
Podemos comenzar haciendo un breve repaso sobre el colesterol.
Según la Sociedad Española de Hipertensión, “el colesterol es un tipo de grasa que circula en la sangre e interviene en muchos procesos del organismo”. Se sintetiza continuamente en el hígado y circula unido a proteínas en la sangre. El colesterol desempeña un papel importante en el organismo ya que, entre otras funciones, recubre las conexiones neuronales de nuestro cerebro, facilita la absorción y el transporte de ácidos grasos y a partir del colesterol se sintetizan algunas hormonas, como la sexuales y las tiroideas. Por tanto es necesario. El problema aparece cuando los niveles son demasiado altos, ya que produce un desajuste metabólico que puede ser perjudicial para la salud, especialmente la salud cardiovascular.
El colesterol alto produce que las grasas se adhieran a las paredes de las arterias y se forme la placa de ateroma, que las pueden obstruir o romper y provocar un accidente cardiaco. Es uno de los principales factores de riesgo cardiovascular y, combinado con otros factores, aumenta la probabilidad de sufrir un accidente coronario, por lo que debemos prestarle atención y regular los niveles con una alimentación adecuada y hábitos saludables. Debemos tener en cuenta, además, que a partir de los 50 años el metabolismo baja, por lo que la acumulación de colesterol empieza a ser mucho más frecuente.
Existen muchos mitos y controversias sobre los alimentos que “causan” colesterol. Los alimentos que antes se consideraban malos, como el huevo o el marisco, varían constantemente debido a nuevos estudios, que han demostrado que no lo son tanto. Y en realidad ya no sabemos qué podemos o no podemos comer para evitar tener niveles elevados de colesterol.
Las últimas investigaciones y recomendaciones médicas optan por cambiar el enfoque y afrontar de una forma más clara el problema: la causa del colesterol alto no son los alimentos específicos, sino que depende de la alimentación y del estilo de vida que se lleva. No es que haya alimentos prohibidos para el colesterol (excepto cuando se sufren problemas cardiovasculares, que se requiere un control estricto de salud), sino que se ha comprobado que sustituir un tipo de alimentos por otros tiene un efecto positivo en los niveles de colesterol.
En general, debemos tener cuidado con los alimentos que destacan por tener azúcares añadidos, hidratos refinados y grasas trans: