Tener una mascota nos aporta alegría, compañía y mucho cariño, pero también una multitud de beneficios para la salud. En concreto, tener un perro puede reducir el riesgo cardiovascular, ya que disminuye el estrés y favorece la práctica de actividad física, cosa que mejora los niveles de colesterol, la hipertensión y los índices de obesidad.

Sufrir una cardiopatía y realizar deporte no sólo no es incompatible sino que además es beneficioso para la salud del corazón. El tipo de ejercicio más adecuado es el aeróbico y siempre debe practicarse bajo supervisión médica.

Cuando se presentan problemas cardiovasculares que dañan el músculo cardíaco y se produce una insuficiencia cardiaca terminal, la única solución viable es sustituir el corazón por otro en condiciones óptimas. Esta intervención se hace necesaria cuando el paciente no ha respondido a otros tratamientos y el corazón está tan debilitado que la esperanza de vida es menor a un año, existe un riesgo de muerte súbita o el paciente no puede disfrutar de una mínima calidad de vida. Hoy hablamos del trasplante de corazón.

La hipertensión arterial es un riesgo cardiovascular importante porque acelera el desarrollo de la arteriosclerosis y puede producir hipertrofia del ventrículo izquierdo que derive en una insuficiencia cardíaca. Por tanto, es muy importante un control de la presión arterial alta.

Durante el embarazo, el corazón de la madre debe trabajar más para satisfacer las necesidades nutricionales y de desarrollo del bebé y es normal que puedan producirse taquicardias. Aún así, siempre es conveniente controlarlas.

Controlar nuestra frecuencia cardiaca nos puede ayudar a conocer el estado de nuestro corazón y a detectar posibles anomalías. ¿Cuántas pulsaciones por minuto son normales en una persona adulta?

Sufrir una emoción fuerte, un susto o una situación de pánico, puede tener consecuencias graves en una persona enferma del corazón, como un accidente isquémico o una arritmia cardiaca.

Una buena manera comenzar el año es prestar atención a la salud. El test Farmacardio te permite, de forma cómoda y sencilla, desde la farmacia, detectar factores de riesgo cardiovascular que podrían dar lugar a una enfermedad coronaria en el futuro.